She is mine!!

No cocinamos, no limpiamos, no lavamos, no planchamos…no ordenamos, no tenemos horarios, no barremos porque saca ampollas, casi ni comemos con tal de no agitarnos. Preferimos llamar al delivery antes que ensuciar en la cocina y comer de la misma bandeja para no ensuciar platos. No entendemos de productos de limpieza, pero si los de belleza. No sabemos marcas de trapos, pero si de ropa y accesorios.
Amamos viajar y conocer lugares nuevos. Podemos pasar días enteros en silencio leyendo, y después mirarnos para darnos un gran abrazo.
Le encantaria tener plantitas de marihuana, porque son tiernas.
Somos compañeras de vida.
Amamos nuestra computadora, a la play y somos futboleras.
Tenemos códigos propios y los que nos ven se sorprenden, quedan atónitos frente al saber que es mi abuela, esa mujer de unas varias décadas (obvio que no se dicen cuantas) que se tatua, que chatea, que tiene Facebook, que me compra alcohol para hacer la previa mientras perrea con nosotras y que hasta una vez se teñía los pelos de distintos colores como fucsia o violeta.
Es rubia Mirella, decir que es coteta es poco, es laburadora, amante de su familia y sabe elegir bien. Es enferma de gimnasia, pero enfrenta a la vida como una leona. Sigue la moda de cerca, sin embargo no titubea en usar colores Shoking que no van con el catalogo de turno. Es atrevida, no teme defender lo que le corresponde y no deja que nada ni nadie la sobrepasa. Te avasalla con su personalidad arrasante y baña de perfume cada lugar que recorre.
Si señores, mi abuela es tan excéntrica como eso que estoy describiendo y mas también. Imposible poder retratarla y dejar marcada la impronta que descarga a su paso como una estela fugaz. Y es eso, es MI Stella.
Durante la niñez, era una súper abuela, solo la veía sábado y domingo, porque el resto de la semana estaba en algun lugar recóndito del país, capacitando señoras. El paso de los años la hizo recapacitar, y comprendió que el trabajo es importante, pero mas importante es disfrutar de la familia.
Amaba cuando me daban permiso para faltar al colegio y viajar aunque sea dos días con ella, amaba también cuando gente de provincias que no conocía (ni a ellos ni al lugar donde vivían) me invitaban a sus fiestas. Y también cuando me conseguía cursos grandiosos para ser “modelito”.
Amaba los privilegios de ser la primer nieta y poder disfrutarla tan solo cinco años solo para mi, después tuve que empezar a compartirla, pero así y todo no dejó de ser la mejor, al punto de que muchos piden que la comparta. No, no la comparto…el que goce de ese privilegio TAN preciado para mi, debe considerarse un afortunado, porque es única y mía.
Si alguna vez me pidieran que de un ejemplo de lucha, fortaleza y garra para salir de todas, mi abuela estaría entre los ejemplos más destacados que nombraría.
Pasamos por momentos difíciles, tuve que levantarla y no me peso. Me hizo upa aun teniendo 19 años y tampoco le dolió la cintura.
Cuando estamos juntas, nos complementamos, somos capaces de hacer hasta lo que mas odiamos, porque amamos incondicionalmente a la otra.
Es capaz de lo inimaginable para regalarme una sonrisa, y yo igual.
Los días con ella son anormales, y por eso la amo tanto.
Si hay algo en esta vida que hay que saber disfrutar es a los abuelos, y la vida me regalo los mas maravillosos.
Ella es mi luz, me puede…su espíritu es grande, su fortaleza in corrompible. Es grande, y no por cuestión de edad.
Su corazón tiene una nobleza inigualable, da hasta lo que no tiene con tal de ver felices a los que rodean.
Que puedo decir para honrarla? No me sirven las palabras, ni las descripciones. Nunca se me complicó tanto escribir como hoy, que me dieron ganas de escribirle a ella.
Esta semana fue de purificación, y gracias a ella.
Si mi vida circunde en una caja de cristal blindado, es porque ella ayudo a mis viejos a construirla. Si mi vida a veces se torna de princesa es porque ella lo permite. Me malcría, me mima, me ama…me consciente y forma parte de esta cosa de persona que hoy soy.
Basta, no sigo, porque las palabras ya no tienen sentido. Definitivamente no la puedo explicar, ojala tengan el placer de conocerla y los que la conocen tengan el placer de afirmar esto que digo.
Gracias abuela, por ser esa mujer tan maravillosa que SOS.
TE AMO!